Agencias EFE

Apenas queda “un plazo de 10 años para salvar la biodiversidad y que los ecosistemas más importantes dejen de ser funcionalmente viables”, han coincidido los especialistas reunidos hoy en una mesa de debate sobre el tema en el marco del II Congreso de Sostenibilidad Ambiental organizado por la revista Cambio 16.

La mesa ha contado con la participación del responsable de gobernanza ambiental de Seo/Birdlife, Juan Carlos Atienza, el director de responsabilidad social corporativa de Heineken, Mauricio Domínguez-Adame, el subdirector de biodiversidad y cambio climático de la Fundación Biodiversidad-MITECO, Ignacio Torres, y el director de conservación de WWF, Enrique Segovia, moderados todos ellos por el director de EFEverde, Arturo Larena.

En opinión de los participantes, es necesario “poner en valor la ciencia en relación con la biodiversidad” y, al mismo tiempo, a ésta con la salud, puesto que se ha demostrado que “la ciencia es una herramienta básica para este cambio radical” de actitud.

En ese sentido, Torres ha asegurado que “el contexto actual ofrece oportunidades enormes para apostar por la transformación hacia un modelo productivo que tenga en cuenta la biodiversidad”, un elemento que a su juicio debe considerarse “esencial en el proceso de transición ecológica”, como demuestra la “legislación contundente” que ya existe a nivel europeo.

Atienza se ha lamentado de que “la mayoría de la gente no percibe la pérdida de biodiversidad”, lo que redunda en la falta de concienciación social al respecto, por lo que “el principal reto consiste ahora en aprender a transmitirlo a la ciudadanía y lograr que ésta se involucre activamente”.

Productividad y empleo

Concienciar a los sectores productivos por medio del diálogo, acompañar a las empresas en las medidas verdes que deseen incorporar  en sus estrategias o proporcionar información y establecer vínculos comunitarios con los vecinos del barrio son “algunas de las actuaciones al alcance de las ong”.

La biodiversidad puede convertirse en un elemento de crecimiento económico” porque “la mitad de la riqueza mundial proviene de la Naturaleza” y por ello es importante destinar el 50 % de los fondos disponibles a objetivos climáticos y de protección de biodiversidad, lo que se traducirá en “restauración del patrimonio natural”.

Segovia/EFE Verde

En cuanto a Domínguez-Adame, ha subrayado que la biodiversidad es también “una fuente de creación de empleo” y ha defendido el fomento de programas de “empleo verde, generando puestos de trabajo de valor vinculados al medioambiente”.

Según fuentes de la Comisión Europea, el número de puestos de trabajo que se podría crear apoyando esta medida rondaría los 150.000 en España y los 2 millones en el conjunto de la Unión Europea, ha recordado Torres.