Comunidad científica espera respuesta del Ejecutivo en iniciativa que protege los corales en Panamá
Fuente: La Estrella de Panamá /María Alejandra Carrasquilla Reina
La comunidad científica panameña se encuentra a la espera de que el Ejecutivo sancione el proyecto de Ley N° 196 que establece la protección de los sistemas de arrecifes coralinos en el país.
Ya han pasado más de 40 días desde que fue enviado el proyecto al Ejecutivo –12 de abril–, cuando la norma establece que ese órgano del Estado tiene hasta 30 días para sancionar o vetar el documento.
“Ante la alarmante situación de riesgo de estos ecosistemas y sus ecosistemas asociados, esperamos que se priorice la reglamentación e implementación efectiva de la norma”, aseveró Joana Ábrego, gerente legal del Centro de Incidencia Ambiental de Panamá, organización que presentó el proyecto el 26 de noviembre de 2019.
A partir de la entrada en vigencia de la ley, el Ministerio de Ambiente (MiAmbiente) tiene un plazo de seis meses para coordinar, diseñar e implementar el monitoreo de los ecosistemas de arrecifes coralinos, iniciando con aquellos cuya existencia se conozcan; y un plazo de 36 meses para hacer el inventario completo georreferenciado y línea de base actualizada de los ecosistemas de arrecifes coralinos y pastos marinos del país.
“La ejecución de esta obligación permitirá a nuestro país conocer la ubicación y extensión exacta de estos frágiles ecosistemas, así como su estado de conservación, viabilizando la corrección de las actividades que les estén impactando conforme a las demás disposiciones de la ley”, destacó la abogada a La Estrella de Panamá.
Otras acciones que contempla el proyecto
Mi Ambiente, el Ministerio de Educación y la sociedad civil se encargarán de sensibilizar a la población sobre la importancia de los ecosistemas de arrecifes de coral, así como de sus hábitats, ecosistemas asociados y especies asociadas mediante campañas de educación formal y no formal.
Por otro lado, se prohibirá la construcción, modificación o cualquier tipo de actividad, tanto en las aguas como en sustrato de ecosistemas de arrecifes coralinos, pastos marinos y ecosistemas asociados, así como todas aquellas actividades que puedan causar daño irreversible a su salud ecosistémica.
“Toda persona natural o jurídica, sea pública o privada, que infrinja las disposiciones de esta ley o cause un grave daño a los ecosistemas de arrecifes de coral, sus ecosistemas asociados y especies asociadas, será sancionada de conformidad con las disposiciones aplicables en materia administrativa y penal”, se lee en el artículo 34.
Los corales, en peligro
De acuerdo con la bióloga marina Maribel Pinto, los arrecifes coralinos son comunidades muy dinámicas y hábitats importantes porque forman barreras para la disminución de los impactos del oleaje en las zonas costeras. “Se estima que absorben alrededor del 80% de la fuerza de las olas, y con esto se evitan pérdidas económicas en las infraestructuras costeras”, sin embargo, entre los desafíos que los corales enfrentan está el cambio climático que provoca el aumento de la temperatura del mar y su acidificación causando episodios de blanqueamiento en los arrecifes en diferentes lugares del país.
A esta problemática se le añade la falta de información sobre la importancia de los corales. “Existen muchas personas que los consideran piedras o plantas, cuando estos son animales”, aseguró Pinto, y por otro lado, también está el “mal manejo de las actividades turísticas cuando las personas visitan lugares donde hay corales, se paran sobre ellos, los tocan e incluso se los llevan”, inclusive las embarcaciones no tienen la precaución al transitar en aguas pocos profundas causándoles daños; y por último, agregó la ambientalista, el uso inadecuado de los desechos que terminan en las zonas costeras, provocando la contaminación del ecosistema y por ende su dificultad para vivir y crecer.
Panamá no cuenta con una normativa actualizada que proteja estos ecosistemas, por lo que la experta considera este proyecto de ley “una oportunidad para hacer las cosas bien para los corales de Panamá”.
Quien también avala la sanción es el biólogo Nemesio Melo miembro de la Fundación Reef 2 Reef, dedicada a la conservación de los corales en Portobelo, Colón. “La iniciativa es positiva porque crear un plan de manejo para la protección, conservación y restauración de nuestros sistemas coralinos y los ecosistemas que dependen de ellos, además de que se le pueda sacar un provecho sostenible por parte de la comunidad”.
Corales en Panamá
De acuerdo con la bióloga Pinto, en Panamá existen alrededor de 130 especies de corales localizados en Bocas del Toro, costa arriba de Colón, la isla de Coiba, isla Secas, Pixvae, Pedasí, el archipiélago de las Perlas, entre otros sitios.
El 80% del ecosistema se encuentra en la comarca Guna Yala, ante esta situación el biólogo Arcadio Castillo y representante del Congreso General Guna en el debate de este proyecto consideró que de llegar a aprobarse la ley significaría un “logro para la sociedad civil porque sería otra herramienta para ese bosque marino”.
Una de las actividades que propone Castillo es preparar a los biólogos gunas para hacer monitoreos científicos y hacer una evaluación para conocer el estado de los arrecifes de coral en Guna Yala.