La ciencia como instrumento para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible

Foto: La Estrella de Panamá. Sin el presupuesto adecuado, alcanzar las metas a 2040 será un esfuerzo difícil en la carrera contra el tiempo en materia de fortalecimiento, apoyo, inducción y promoción de la ciencia, la tecnología y la innovación.

Fuente: La Estrella de Panamá

Esta entrega tiene relación con la forma en que la ciencia apoya el desarrollo sostenible de los países y es importante conocer el significado del término. Según la Real Academia de la Lengua Española, la palabra ciencia deriva del latín scientia y está definida como el conjunto de conocimientos obtenidos mediante la observación y el razonamiento, sistemáticamente estructurados y de los que se deducen principios y leyes generales con capacidad predictiva y comprobables experimentalmente.

La pregunta esencial de qué es ciencia se responde diciendo que es el conocimiento de un tema. Ahora bien, ¿qué hacemos con el conocimiento? Si el conocimiento sobre un tema permite entenderlo desde sus ventajas y desventajas, este conocimiento aporta sobre los puntos que se deben fortalecer para transformar las desventajas en ventajas, es decir transforma las necesidades en oportunidades.

Este enfoque de transformación podemos aplicarlo al explicar lo que requiere un país para alcanzar su desarrollo.

La plataforma de economía Economipedia reseña que el subdesarrollo es la situación en la que puede encontrarse un territorio, por presentar carencias relacionadas con la riqueza, las capacidades y oportunidades y los servicios y, por tanto, es una situación en la que puede encontrarse un determinado país, que, por ciertos factores presenta un escenario en el que carece de oportunidades, de capacidades, de servicios o de riqueza entre su población.

Precisamente esta definición es la que permite a los economistas apoyarse en el subdesarrollo para crear indicadores como el producto interno bruto (PIB) para medir el grado de bienestar de un país.

Las consecuencias del subdesarrollo están ligadas a una elevada mortalidad en ciertas partes del territorio, a la desnutrición, la baja esperanza de vida, a las enfermedades, epidemias y al bajo nivel educativo.

Debido a que los países en vías de desarrollo buscan elevar su PIB, es que se crean instituciones que apoyen a fortalecer el conocimiento de los temas primordiales o prioritarios en los que los países identifican que deben enfocar sus esfuerzos para convertir sus carencias en fortalezas para el desarrollo.

Así es como en el año 1997 nace la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), con el objetivo de fortalecer, apoyar, inducir y promover el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación para elevar el nivel de productividad, competitividad y modernización en el sector privado, el gobierno, el sector académico-investigativo, y la población en general.

La Senacyt articula a la ciencia, la innovación y la tecnología como herramientas que apoyan el desarrollo del conocimiento.

Esta entidad sostiene su accionar en que la economía del país está basada en el conocimiento y, por ello, ha elaborado sus lineamientos con base en que la investigación y la innovación son los principales conductores del crecimiento y de la transformación de una economía, de la productividad y la competitividad, de la preservación ambiental y la utilización racional de los recursos naturales, del desarrollo social, la superación de la pobreza y la inequidad, y de la cultura.

Con esta visión, Senacyt adopta la ‘Política nacional de ciencia, tecnología e innovación de largo plazo’, con una proyección al año 2040 señalando dentro de ella que Panamá debe enfrentar en los próximos 20 años cuatro grandes desafíos:

1. Alcanzar un mayor nivel de desarrollo sostenible.

2. Avanzar en el desarrollo inclusivo.

3. Consolidar altos niveles de competitividad.

4. Crear una capacidad local de generación, adaptación, difusión y utilización de conocimiento.

Plan estratégico nacional de ciencia, tecnología e innovación (Pencyt)

Las metas para alcanzar los desafíos a los que se enfrenta Panamá están reflejadas en el Pencyt y han sido definidas para contribuir a la transformación del país mediante un conjunto de acciones dirigidas a crear e implementar una cultura basada en el conocimiento, integrando de esta manera al istmo en la economía del conocimiento.

Este objetivo del Pencyt está alineado y contribuye directamente a alcanzar aquellos objetivos establecidos en el plan estratégico del Gobierno Nacional.

Aplicaciones de la ciencia, la innovación y la tecnología

A través de la Senacyt es que Panamá ha establecido que el desarrollo del país tenga un hilo conductor basado en la ciencia.

Un ejemplo de ello es el accionar del Estado en la comprensión de la pandemia del SARS-CoV-2, cuyo entendimiento se ha basado en datos científicos generados en los laboratorios nacionales y conducidos por investigadores científicos de centros locales.

Así lo recoge una publicación de La Estrella de Panamá: ‘Panamá, a la vanguardia con investigaciones sobre covid-19’.

Esta nota hace énfasis en que los científicos habían evaluado la seroprevalencia de la covid-19 en la población, la adecuación y la producción masiva del medio de transporte viral, entre otros aspectos, a fin de fortalecer la capacidad de contención de la pandemia dentro y fuera de Panamá.

Además, la publicación de ‘La Decana’ indica que Panamá se convirtió en el primer país de Centroamérica y el tercero en América Latina en realizar investigaciones científicas con respecto al virus y que la investigación fue liderada por el Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (Icges), a través de sus científicos en virología y genómica.

Desafíos

El caso del SARS-CoV-2 es un ejemplo de cómo a través de la ciencia se fortalece el PIB de Panamá, y he allí el desafío que enfrenta este campo en el istmo. Se trata de que la inversión del presupuesto del Estado permita el fortalecimiento de las instituciones que hacen ciencia.

Sin el presupuesto adecuado, alcanzar las metas a 2040 será un esfuerzo difícil en la carrera contra el tiempo con miras a obtener el fortalecimiento, el apoyo, la inducción y la promoción de la ciencia, la tecnología y la innovación con el propósito de elevar el nivel de productividad, competitividad y modernización en los sectores productivos de Panamá.

De allí que el mayor desafío para desarrollar el país sea la inversión económica en la ciencia.

Datos de interés de las apuestas estratégicas para 2019-2024. Senacyt busca:

• Multiplicar el número y calidad de los investigadores panameños por millón de habitantes, invirtiendo en universidades, centros, laboratorios y proyectos estratégicos, y dotándolos de presupuesto suficiente para interactuar al nivel de sus pares internacionales.

• Apoyar la transformación universitaria como piedra angular para dar un salto de calidad en materia de recursos humanos de alto nivel que acerque al país a una economía del conocimiento.

• Transferir tecnología y conocimiento, mediante acuerdos de vinculación entre universidades, empresas nacionales y multinacionales y gobierno, a fin de desarrollar los principales pilares sociales y económicos del país.

• Elaborar agendas de investigación e innovación por sector en forma conjunta para generar un marco de prioridades por sector.

• Fomentar un incremento de la inversión privada en innovación mediante el financiamiento a través de fondos de inversión, para empresas que estén dispuestas a desarrollar soluciones en conjunto con los centros de investigación.

• Territorializar los beneficios de la ciencia, la tecnología y la innovación (CTI) según las potencialidades y necesidades de las regiones del país para apoyar la transformación productiva basada en la innovación, el conocimiento y la tecnología.

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