Fuente: La Estrella de Panamá

El diputado Rolando Alberto Rodríguez, se unió a la denuncia de moradores del corregimiento de Caimitillo, en el circuito 8-9, quienes advierten del problema que están confrontando con la tala indiscriminada de árboles en la Cuenca Hidrográfica de Panamá y otros daños ambientales irreversibles.

Rodríguez, diputado suplente del Movimiento Liberal Republicano Nacionalista (Molirena), del circuito 8-9, que incluye los corregimientos de Alcalde Díaz, Caimitillo, Chilibre, Ernesto Córdoba y Las Cumbres; explicó que están exigiendo una acción inmediata al Ministerio de Ambiente y de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) para frenar la tala de árboles, la explotación de la minería abierta, la afectación de la cuenca del Canal, el daño a la flora y a la fauna, justamente en la comunidad de Nuevo Caimitillo que es netamente “Parque Nacional Chagres”. 

“Lamentamos que no haya una fiscalización permanente en defensa de esta cuenca hidrográfica, la protección de estos recursos naturales, que todos sabemos su importancia no solo por el manejo del Canal sino también como fuente principal para el suministro de agua potable para el país”, precisó Rodríguez. 

Manifestó que el principal problema de esta tala y afectación del medio ambiente, en esta región, radica en la concesión de cientos de hectáreas de tierra a empresas cementeras del área, para la explotación de materiales minerales, causando severos daños al ecosistema. 

“Para los moradores que quieren cortar un árbol para hacerse un rancho sí hay ley y sanciones, pero para empresas que talan miles de árboles, incluso en vía de extinción como el cocobolo, nadie las detiene ni regula, y esto no puede continuar por el bien de nuestra cuenca hidrográfica y todo lo que representa”, sostuvo Rodríguez.

Precisó que lo más triste de todo es que hay una Ley 21 del 2 de julio de 1997 que protege la Cuenca Hidrográfica del Canal, la cual asegura, «no se está aplicando ya que lo que se ve a diario es la tala indiscriminada de árboles, la afectación de la flora y la fauna y no hay nadie que detenga este daño ambiental permanente, y urge la actuación inmediata de MiAmbiente y la ACP».